Cuando anunciaron temperaturas de entre -9°C y -12°C en Washington, la fotógrafa Angela Kelly decidió aprovechar la situación para hacer volar su creatividad. Y junto con su hijo de 7 años decidieron ir a soplar burbujas de jabón para luego fotografiarlas cuando estallaban, se congelaban y se derretían.
El resultado te va a encantar…
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