La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza declaró al kākāpō extinto en estado salvaje en 1994, pero en el año 2000, los esfuerzos de conservación lograron salvar a la especie de la extinción y fue declarada en peligro crítico de extinción en 2000.
Los kākāpōs abundaban en la Isla Norte, la Isla Sur y la Isla Stewart en Nueva Zelanda antes de que llegaran los humanos; hoy viven en Whenua Hou (Isla Bacalao), Isla Anchor y Te Hauturu-o-Toi (Isla Pequeña Barrera).
Una gran amenaza para estas aves no voladoras es la presencia de depredadores mamíferos invasores como los gatos (que cazan kākāpōs) y los armiños y las ratas, que comen huevos de kākāpō. Hoy en día, todos los depredadores introducidos que amenazan a los kākāpōs han sido eliminados de su hábitat protegido para crear islas libres de depredadores.